Lima, Perú; 4 de noviembre de 2025.– El gobierno de Perú anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con México tras la decisión del gobierno mexicano de otorgar asilo político a Betssy Chávez, ex primera ministra del expresidente Pedro Castillo, quien enfrenta un proceso judicial por el presunto delito de rebelión.
El canciller peruano Hugo de Zela informó que, pese a la medida, se mantendrán las relaciones consulares, mientras que la encargada de negocios de la embajada mexicana en Lima deberá abandonar el país en un plazo determinado.
La decisión profundiza una crisis diplomática que se ha extendido desde diciembre de 2022, cuando Castillo fue destituido por intentar disolver el Congreso y gobernar por decreto. Desde entonces, las relaciones entre ambos países se deterioraron debido a las reiteradas críticas del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador y, posteriormente, de su sucesora Claudia Sheinbaum, quienes calificaron la destitución como un “golpe de Estado técnico”.
El asilo concedido a Betssy Chávez, liberada en septiembre de 2025 tras un fallo del Tribunal Constitucional de Perú, se convirtió en el detonante final de la ruptura diplomática. Según el gobierno peruano, la decisión mexicana constituye una “interferencia inaceptable” en los asuntos internos del país.
En contraste, autoridades mexicanas defendieron el otorgamiento del asilo bajo el argumento de que México actúa conforme a su tradición humanitaria y a los convenios internacionales en materia de refugio político.
El conflicto marca un nuevo capítulo en las tensiones bilaterales entre Lima y Ciudad de México, que desde 2022 han pasado de los intercambios verbales a medidas diplomáticas más severas. Analistas internacionales advierten que esta ruptura podría impactar la cooperación regional y los vínculos comerciales entre ambos países.
